Pasó de Noche
En un estudio sobre el uso de estrategias metacognitivas, realizado en
una universidad de México, los investigadores seleccionaron a dos estudiantes
con el objetivo de conocer su historia académica. La selección se hizo con base
a los siguientes criterios:
1. Estudiantes sobresalientes
2. Estudiantes con bajo rendimiento académico
Cuando entrevistaron al primer estudiante al que llamaremos “A”, comenzó
explicando que su rendimiento en la educación primaria era bastante bueno, pues
solía memorizar toda la información que el profesor le daba y los exámenes los aprobaba
sin dificultad. Ahora menciona que va a clases pero no puede concentrarse y
estudia pero no se le “pega” nada. Sus calificaciones son bajas en general,
aunque pasa largas horas estudiando. Se siente cada vez más cansado y
deprimido. Es habitual que hagan uso frecuente de tácticas de aprendizaje
vinculadas a la memorización de información y repetición de contenidos. Cuando
se enfrenta a los exámenes, acostumbra estudiar un día antes el contenido de
forma literal; el problema es que si se le llega a olvidar una palabra, ya no
puede recordar el concepto completo.
Otra estrategia que suele utilizar a menudo es escribir literalmente todo
lo que el profesor explica y toda la información que encuentra cuando le dejan
investigar algo. Comenta que tiene habilidad para realizar tareas que requieren
seguir pasos establecidos, pero se le dificultan aquellas en las que debe organizar
y analizar el contenido. Además, no le gusta leer ni trabajar en equipo porque
acaba enojado o “echando relajo”.
Por otro lado, en la entrevista del estudiante “B”, él comentó que desde
pequeño solía estudiar repasando en casa lo que veía en clase; primero repitiendo
en voz alta el material que estudiaba y, posteriormente, realizando resúmenes
en donde procuraba recuperar las ideas principales. En la actualidad, cuando
asiste a clases, realiza anotaciones utilizando palabras claves que le ayudan a
recordar lo que expuso el profesor. Tiene una afición a la lectura y, cuando se
trata de abordar textos complejos, suele tener el diccionario a la mano para
consultar aquellas palabras que no conoce, resaltar las ideas principales y
elaborar preguntas sobre el texto para poder responderlas al finalizar la
lectura.
Además, frecuentemente, realiza cuadros, mapas o tablas sencillas que le
ayudan a organizar el material de las asignaturas. Desde el inicio del semestre
suele establecer metas que le permitan dirigir sus actividades; planea lo que
va a realizar en cada asignatura y nunca espera hasta las últimas semanas para
estudiar, pues suele hacerlo después de clases diariamente. Además, está consciente
de que la forma de abordar el estudio de cada asignatura depende del área
disciplinar que se trate; Por ejemplo, si son matemáticas, sabe que se debe
dedicar a realizar ejercicios prácticos que le ayuden a dominar los temas; en
cambio si se trata de filosofía, sabe que la lectura y los organizadores
gráficos son una estrategia necesaria para conocer y analizar el contenido.
Cuando alguna materia se le dificulta, busca información extra que le ayude a entender y suele pedir ayuda al profesor y a sus compañeros, con quienes se organiza para discutir los temas difíciles y aclarar las dudas entre todos. Le gusta participar en actividades grupales y realizar trabajos prácticos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario